De Zárate a toda América Latina: el movimiento detrás de las exportaciones de Toyota
Todos los días parten casi 800 Hilux y SW4 desde la planta de Toyota hacia el interior del país y a 22 países de la región. Una de las claves es el trabajo con Terminal Zárate, el puerto operado por Grupo Murchison que conecta a Toyota Argentina con el Atlántico, el Pacífico y el Mar Caribe. ¿Qué implica semejante operación? Los protagonistas de esta gesta cotidiana cuentan de qué se trata.
Zárate, 10 de junio de 2024. “A tiempo, de manera eficiente, a un mínimo costo, con altos estándares de calidad y con la seguridad como prioridad”. Quien habla es Sebastián Castelli, gerente de Logística de Toyota Argentina, y la precisión de las frases que usa son el mejor ejemplo de la concentración que requiere su trabajo. Acá no hay tiempo que perder. Su equipo, formado por 16 personas en administración y más de 60 en operaciones, es el encargado de hacer funcionar una maquinaria compleja: el movimiento de los Toyota que llegan a Argentina y de las Hilux, SW4 y Hiace que parten desde Zárate hacia todo el territorio nacional y el resto de Latinoamérica. Con todo lo que eso significa: barcos, camiones, aduanas, condiciones climáticas, cortes de tránsito, regulaciones, contratos, reclamos, urgencias, imponderables y un largo etcétera.
“Nos enfrentamos a muchos desafíos de manera constante”, agrega Julián Benedetti Basone, jefe de Logística de Vehículos. “Desde una congestión portuaria o frontera interrumpida a partir de la cual tenemos que buscar rutas alternativas, hasta la pandemia, que cambió por completo la configuración logística. O una guerra en Medio Oriente, que cierra el Canal de Suez y demora la llegada de un barco desde Asia”, explica. Y cierra: “Tenemos que tener la capacidad de adaptarnos rápidamente a todo”.
De la planta de Zárate parten todos los días casi 800 Hilux y SW4. El 80% se exporta a 22 países de América Latina. En orden alfabético: Aruba, Bahamas, Belize, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Curaçao, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, St. Marteen, Uruguay y Venezuela. Alrededor del 50% de estas exportaciones se realiza en camiones por vía terrestre y la otra mitad, por vía marítima.
A eso se suma la importación de los Corolla, Corolla Cross y Yaris que se producen en Brasil, y otros modelos, como los camiones Hino o los lujosos Lexus que llegan desde Japón. El resultado es una operación que implica el movimiento de casi 1000 vehículos diarios, con más de 10 barcos y 300 camiones en circulación. Pero sobre todo, muchísima comunicación: “La clave fundamental es el diálogo permanente entre operadores logísticos, navieras y puertos para cumplir con nuestro objetivo común: llegar a nuestros clientes. Si hay un problema, informarlo rápidamente. Todos los que estamos en la cadena logística necesitamos acompañarnos y confiar en el otro. Es imprescindible. Por eso Toyota insiste tanto en trabajar a largo plazo con cada proveedor y socio, independientemente de la coyuntura: si estamos en esto mirando a futuro, cualquier inconveniente en el presente se resuelve con más facilidad”, dice Sebastián Castelli.
Confianza mutua: la clave para crecer
La planta de Toyota en Zárate está ubicada estratégicamente en el cruce de las rutas nacionales 9 y 12. La primera comienza como Autopista Panamericana y es una de las principales arterias que atraviesan la zona núcleo agrícola de Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba para llegar al norte del país y luego a Bolivia. La RN 12, que inicia con el icónico puente Zárate-Brazo largo, es la vía de acceso más importante desde Buenos Aires hacia la Mesopotamia, Uruguay, Paraguay y Brasil.
Pero además, la planta está ubicada a solo 9 kilómetros del Río Paraná y la Terminal Zárate, el primer puerto privado construido en Argentina en 1996, y el primero de América Latina diseñado exclusivamente para el movimiento de vehículos, al que luego se sumó Contenedores y Cargas generales. Zárate es una de las 6 terminales portuarias que opera Grupo Murchison en Argentina y es un socio clave de Toyota. De hecho, nacieron prácticamente juntas: la primera Hilux argentina salió de la fábrica el 21 de marzo de 1997.
Terminal Zárate tiene un predio de más de 280 hectáreas con una capacidad de 70.000 unidades, al que arriban vehículos importados y desde donde parten las Hilux y SW4 argentinas hacia toda la región. A la terminal llegan 300 unidades promedio por día, lo cual requiere una coordinación ajustada y a contrarreloj. “La Terminal es el nexo entre las operaciones de exportación e importación de Toyota, y es un orgullo que nos hayan elegido para todas sus operaciones portuarias”, afirma Cristian Ratti, Jefe de Operaciones de Buque de Terminal Zárate.
“Desde el inicio de nuestras operaciones, llevamos más de 11 millones de vehículos operados, siempre con los mismos estándares de eficiencia, calidad y seguridad que los puertos más importantes de Estados Unidos, Europa o Asia”, explica Ratti, y agrega: “Tenemos bajo nuestra responsabilidad vehículos de calidad global, por lo cual nuestra operación también tiene que serlo”.
Grupo Murchison tiene una trayectoria de 127 años en operaciones portuarias en Argentina y es un referente en el comercio exterior, tanto de vehículos como de contenedores y cargas proyecto. Terminal Zárate es una escala directa de las principales líneas marítimas que operan en la región y conecta con más de 300 puertos en el mundo. En la actualidad, emplea a 1.100 personas solo en la ciudad de Zárate.
Una sola Toyota: Argentina cada vez más cerca de la región
“Hacemos mil cosas. Pero en el fondo, todo se reduce a una sola: en Exportaciones conectamos personas”. Federico Hassel es Ingeniero en Toyota Sales and Service Division (TSSD) para América Latina y su trabajo es conectar la compleja operación logística de Toyota Argentina y Brasil con las necesidades comerciales de los distribuidores en el resto de la región. ¿Qué significa esto? Identificar y gestionar necesidades en cada uno de los 22 mercados en términos regulatorios, de abastecimiento, mejora de la calidad y muchos otros. “Nuestro trabajo es garantizar y mejorar continuamente la operación. Ayudamos a encontrar oportunidades comerciales, gestionamos los pagos de manera eficiente y mantenemos constantemente una comunicación fluida para garantizar que las unidades lleguen a tiempo”, explica Hassel. Y agrega que “en este entorno, innovar es fundamental”. Desde 2023, por ejemplo, los distribuidores acceden a toda la información de sus unidades a través de un dashboard digital, lo que reduce los tiempos de comunicación y hace más eficiente la gestión.
Su área, tal como existe hoy, se creó en 2019, cuando Toyota Motor Corporation decidió trasladar las oficinas regionales de América Latina, que permanecían en Japón, a la Argentina. La decisión tenía toda lógica: era necesario unificar la atención a los distribuidores regionales en un lugar más cercano, con un mismo huso horario y un idioma compartido. Y además, formaba parte de la estrategia de crecimiento de las plantas de Argentina y Brasil. En 2015, menos de la mitad de los Toyota vendidos en América Latina provenían de las plantas locales. Hoy, casi 8 de cada 10 son Hilux o SW4 producidas en Zárate; o Corolla Cross, Corolla y Yaris brasileños.
Codo a codo con Exportaciones trabaja el equipo de Country Specialists, dedicados exclusivamente a atender las necesidades de cada mercado. La cercanía de estos especialistas con cada distribuidor en cada uno de estos países es clave para el planeamiento de ventas, la resolución rápida de cualquier inconveniente y la atención al cliente final. Así lo describe Mariano Rullo, gerente de Regional Sales Group de TSSD: “Nuestro equipo lleva la relación día a día con cada distribuidor. Analizamos precios, lanzamientos de producto, nuevos proyectos y tomamos decisiones de acuerdo a las necesidades de nuestros clientes. Además, trabajamos en repuestos y posventa, para unificar la calidad de la experiencia de usuario en todo el continente. Y ponemos mucho foco en la transformación del negocio para convertirnos en una compañía de movilidad: KINTO, Usados Certificados y demás proyectos a largo plazo para ofrecer cada vez mejores servicios que se adapten a los cambios de hábitos que atraviesa nuestra sociedad”.
Hilux: la pick-up más vendida de América Latina
Hilux es uno de los modelos más emblemáticos de Toyota a nivel mundial y se ha consolidado como la pick-up más elegida en América Latina. Y más allá también: en 2022 y 2023, de acuerdo a estimaciones de consultoras privadas, fue el vehículo más vendido entre todos los segmentos en toda la región, desde Ushuaia hasta el Caribe.
El principal destino de exportación de las Hilux que se producen en Zárate es Brasil, con alrededor del 40% del total. Desde su nacimiento, la operación de Toyota en Argentina se concibió en absoluta complementariedad con Toyota do Brasil: la primera especializada en la producción de vehículos comerciales o utilitarios con chasis (Hilux, SW4 y desde febrero, la van Hiace) y la segunda en vehículos de pasajeros como Corolla o Yaris.
Las primeras exportaciones de la Hilux nacional se concretaron en 1998 hacia los países del Mercosur: Brasil, Uruguay y Paraguay. Y a lo largo de los años se fueron incorporando otros destinos. El salto principal se dio a partir de 2015, cuando se amplió la capacidad productiva y se renovó completamente la planta de Zárate para el estreno de la octava generación de Hilux. Ya en 2022, si bien Brasil sigue siendo el primer importador de Hilux, el resto de los países en conjunto lo superaron con más del 50% de las exportaciones totales.
En volumen, en 2023, el top 5 de países con más ventas de Hilux fueron 1° Brasil, 2° Argentina, 3° Perú, 4° Chile y 5° Colombia. En sexto lugar se ubicó Guatemala, el país más poblado de Centroamérica, donde Hilux es una aliada clave de productores de café, azúcar, banana y otros cultivos, y también del turismo, actividad que crece todos los años por el atractivo natural, histórico y cultural del país.
Para Toyota Argentina es un orgullo producir vehículos que promueven el desarrollo económico y social de toda América Latina, al mismo tiempo que genera empleo en la planta, en los más de 60 autopartistas locales y otros 1.200 proveedores directos e indirectos que trabajan todos los días con el mismo objetivo: ofrecer movilidad de calidad para cada vez más personas.